Replier bots - Bots en Twitter

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El proyecto de los replier bots se inspira en el hecho de que la desinformación es esparcida por humanos y no humanos, y busca imitar las dinámicas de esa coexistencia. De hecho, resulta en muchos casos muy complicado para el usuario común de redes sociales diferenciar a una entidad humana de una no humana. Ello no es fácil incluso para los investigadores de los campos de las ciencias de la computación, que han desarrollado estudios para caracterizar el comportamiento de estas entidades no humanas y su impacto en colectividades humanas y en el mundo offline. En ese sentido, este conjunto de piezas, siendo bots, fingirán ser humanos, serán caracterizados como tales y esparcirán mensajes en el entorno de la red social bajo determinados posicionamientos, imitando razonamientos humanos, pero la creación de mensajes y respuestas operará de forma automática.

Dicho esto, estas piezas de literatura electrónica trabajan de forma complementaria respecto a los generadores. Se suman a ellos en el objetivo general de imitar las dinámicas de producción y distribución de las noticias falsas. Sin embargo, no componen texto de la misma manera. Respecto a los generadores, se ha hablado de que uno de los procedimientos de composición es la expansión de las narrativas preexistentes de las noticias falsas. Ello se ha realizado a partir de intercambios en el eje paradigmático de las informaciones que han sido clasificadas como falsas por los fact checkers hispanoamericanos agrupados en la iniciativa Latam Chequea. De ese modo, donde se encontraba en el texto original el nombre 'Bill Gates', correspondiente al cofundador de la compañía transnacional Microsoft, se ha intercambiado en el texto generado por el nombre de algún otro empresario entre los más adinerados a nivel global. Tal es, en resumidas cuentas, el procedimiento central del Generador de Teorías de Conspiración y del Generador de Recetas de Curas Milagrosas. Así se consigna en la documentación del primero y del segundo. En esta ocasión, se ha buscado explorar el procedimiento de expansión narrativa desde una perspectiva distinta.

¿Qué son los replier bots?

Los replier bots (o bots replicadores) son pequeños programas informáticos creados con la herramienta disponible en línea Cheap Bots Done Quick, la cual, con una codificación simple, permite crear una gran cantidad de textos a partir de combinar componentes textuales de forma aleatoria y siguiendo un ordenamiento lingüístico prefijado. Estos textos deberán cumplir con la extensión de 280 caracteres debido a que los bots son creados con la herramienta para que operen en Twitter. En el caso de este proyecto, se busca hacer uso de esta herramienta con fines literarios. De ese modo, estos replier bots tienen como objetivo compartir y comentar los textos que producen estos generadores (es decir, 'responder' a los tuits producidos por estos generadores, que se encuentran también como entidades en Twitter bajo sus mismos nombres -Generador de Teorías de Conspiración y Generador de Recetas de Curas Milagrosas-). Desde el punto de vista literario, con ello se busca sumar otro nivel a la expansión de los relatos de las noticias falsas: estos no solo serán expandidos por los generadores, sino que también serán compartidos y comentados por los replier bots. Con ello, estos textos generados de forma anónima son compartidos por entidades digitales con nombre y apellido, y foto de perfil. Es decir, pasan a ser parte de una conversación digital que estas entidades no anónimas, que cuentan con los datos básicos de perfil como los usuarios humanos, forman con sus seguidores.

Este procedimiento de crear una conversación entre entidades digitales forma parte del objetivo central del proyecto de Contenido Manipulado, que es el de imitar las dinámicas de producción y distribución de la desinformación. Este grupo de bots compartirán los tuits de los generadores en sus perfiles personales, con lo cual los textos producidos por entidades anónimas pasarán a habitar el historial de publicaciones de entidades con nombre y apellido, y foto; es decir, que emulan ser personas reales. Con ello estas supuestas personas esparcen estos textos literarios que imitan a las noticias falsas, de la misma manera que los usuarios de redes sociales esparcen las noticias falsas reales.

Por otro lado, este procedimiento no es solo de distribución, sino también de producción, debido a que los textos que escribirán estos bots son diferentes a aquellos de los generadores. Es más, se busca que los comentarios de los bots guarden, en primer lugar, una relación lógica con el mensaje comentado: se buscará simular que el comentario nace de una reflexión o de un procesamiento del contenido del texto de los generadores, con lo cual se dibuja un razonamiento coherente entre ambas distintas publicaciones. En segundo lugar, se busca trazar una relación sintáctica entre las dos publicaciones, ya que el replier bot aludirá mediante frases o referentes (como 'esto', 'este', 'esta publicación', etc.) directamente a los textos de los generadores. De esta manera se busca producir un encadenamiento coherente y cohesionado entre el texto nuevo del bot y el texto producido con anterioridad por los generadores.

Sobre nombres, imágenes y heterónimos en red social

Como se ha planteado, este proyecto busca ir más allá de la producción de textos que sean simulaciones de noticias falsas, y desarrollar también identidades digitales que imiten identidades de personas reales que compartan información falsa. A fin de lograr verosimilitud, se busca trazar al menos un boceto de lo que sería identidad digital con características específicas. Ello para que se procesen e interpreten estas supuestas informaciones falsas desde un lugar específico de enunciación.

Lo más evidente son los datos de perfil. Estos bots tienen nombres ficticios. En realidad, son nombres extraídos de autores ficticios creados por el escritor portugués Fernando Pessoa (1888-1935), quien creó lo que los críticos llaman heterónimos. Ello quiere decir que no solo utilizó su nombre para publicar sus textos, sino también otros; sin embargo, no se trata solo de la práctica de la adopción de seudónimos, sino de la creación de identidades autoriales ficticias, cuya existencia en el mundo real se constata solamente con la escritura y firma de sus obras. Es más, estas identidades son independientes entre sí, y como tales desarrollan temas propios, tienen visiones del mundo distintas al igual que registros lingüísticos específicos, y son artífices de géneros o subgéneros distintos entre ellas. Es decir, no se trata de enmascarar al mismo autor bajo otro nombre, sino de crear otros autores que se propongan como independientes del autor que tiene existencia más allá del texto. Según el crítico Jerónimo Pizarro, Pessoa creó 136 heterónimos a lo largo de su obra. De ellos, son cuatro los que alcanzaron mayor notoriedad. Ello porque estos conforman lo que sería el canon de la obra de Pessoa, que es variada y extensa. Se trata de Ricardo Reis, Álvaro de Campos, Alberto Caeiro y Bernardo Soares. Y para nombrar a los bots se han mezclado los nombres y apellidos de estos cuatro autores. Es por ello que uno de los bots se llama Ricardo Cairo y otro Bernardo de Campos.

Además del nombre, se agrega una foto. Ya que se trata de una entidad ficcional, la foto ha sido tomada del sitio This Person Doesn't Exist (https://thispersondoesnotexist.com/), que, como su nombre lo indica, genera imágenes de personas que no existen. Este sitio web, para producir tales imágenes trabaja con redes generativas adversarias (GAN, generative adversarial networks en inglés), que es una clase de machine learning en la cual dos redes neuronales trabajan de forma conjunta para generar imágenes realistas, en una dinámica en la cual una red propone candidatas de imágenes y la otra las evalúa como realistas o no realistas. Para comenzar a funcionar, se trabaja con un conjunto de datos que servirán de base para la posterior producción generativa de las redes. Ello podría tener cierta lógica interna: a un autor cuyos únicos indicios de existencia son los textos que produce se le asigna la foto de una persona que no existe, que habita el entorno digital a partir de una sola imagen. Al fin y al cabo, esos dos componentes pueden ser los más relevantes para identificar a una persona en una red social como Twitter: una imagen de perfil, que estabilice sus rasgos físicos propios ante la plataforma misma y los otros usuarios, y publicaciones periódicas que den cuenta de los eventos de su vida, sus pensamientos, sus relaciones sociales, entre otros. En otras palabras, una imagen que sea prueba de los rasgos físicos que son propios de él/ella y una narrativa de quien es -que también ha de ser propia-. Del mismo modo, tanto la producción de textos por parte del bot como de la imagen son, a pesar de la mayor complejidad técnica de This Person Doesnt Exist, de naturaleza algorítmica, lo que podría agregar algún otro nivel de coherencia interna a las piezas de literatura digital.

Expansión narrativa de las fake news en la conversación digital

Desde un punto de vista narratológico, los relatos del los generadores son expandidos por las respuestas que generan los replier bots. Por ejemplo, con la frase "¡Ya no se puede ocultar más!", con la que comienza uno de los posibles tuits del bot Bernardo de Campos, se hace referencia al texto que produce el Generador de Teorías de Conspiración. A partir de ello, es posible identificar dos dimensiones narrativas. La primera es la del relato del generador, en el que se construye una narración que simula ser una fake news. Es la dimensión de los conspiradores, de las acciones de opresión de los poderosos y de las acciones de los héroes frente a estos, o bien el de las curas a base de plantas medicinales, si se tratara del Generador de Recetas de Curas Milagrosas; al fin y al cabo, la dimensión del relato distópico o magicorrealista. La segunda es la dimensión de la conversación de una identidad particular, Bernardo de Campos o Ricardo Caeiro, desde su perfil propio de Twitter. El marco narrativo es la discusión que sostiene esta identidad ficcional con otros usuarios de la red social en torno a la verdad de los hechos de la pandemia. De tal modo, el replier bot incrusta el relato del generador en sus publicaciones personales. Se apropia de él y amplifica su mensaje con un comentario. Lo hace parte de su comportamiento digital. El mensaje del generador está disponible a través de él, que lo ha canalizado hacia su historial de publicaciones. Además, el texto del generador es el punto de partida para una manfiestación propia de su identidad. Es decir, el relato del generador es insertado en un razonamiento producido a partir del lugar de enunciación específico de De Campos o Caeiro. Este razonamiento incluirá componentes identitarios particulares de este.

Identidades autoriales en el entorno digital

En el artículo “The Bot Politic” de Jacqueline Feldman (https://www.newyorker.com/tech/annals-of-technology/the-bot-politic), la autora comenta su experiencia en el desarrollo de un chatbot llamado Kai encargado de guiar a los usuarios en trámites bancarios. Específicamente, a Feldman, quien trabaja con inteligencia artificial, se le ha pedido desarrollar la personalidad del chatbot. Esto resulta para ella aterrador en un primer momento, debido a que siente que puede escribir de forma regular diálogos pero que la palabra misma personalidad contiene la categoría 'persona' en ella: "My contract bound me to create a ‘personality,’ which sounded like more than the sum of its parts, and also has the word ‘person’ built into it" (2016). Se trata de una personalidad, pero Kai, comenta la autora, tiene que cumplir solventemente sus funciones, por lo cual tiene que ser "friendly but authoritative, engaging but not creepy" (2016), además de que, a diferencia de una persona, no puede abandonar la comunicación. Resulta interesante apreciar cómo se va diseñando la personalidad para una entidad digital, que en este caso debe ser funcional para cubrir sus tareas y, sin embargo, Feldman agrega algunas características a Kai que se pueden entender como identitarias, propias de Kai y no de algún otro chatbot que tenga que cumplir funciones similares: "I decided that I would write Kai as a magpie for idioms, puns, and encyclopedic facts, and that it would frame them in its own way, like an entity new to Planet Human" (2016). Incluso con un sentido del humor que se podría considerar particular. Una broma que generó Kai es la siguiente: "Humans save their money for a rainy day but don’t spend more when it rains" (2016).

Con el trabajo que programadores como Feldman desarrollan para entidades digitales, sumado a la revisión de una de las mayores particularidades creativas de la obra de Pessoa, se estableció una idea relevante para este proyecto de literatura electrónica: la creación de entidades autoriales digitales con rasgos personales como procedimiento literario. Es decir, se busca trasladar la creación de entidades autoriales ficticias, los heterónimos de Pessoa, al terreno digital y aplicar este procedimiento a los bots de Twitter. Para este proyecto se buscará darle a cada uno de los bots si bien no una personalidad, porque eso sería algo muy complejo de conceptualizar y que demande mucho más tiempo del disponible para el trabajo, además de que posiblemente requiera habilidades técnicas especializadas en la programación, sí algunas características reconocibles. Estas serían unas determinadas áreas de interés sobre las cuales girarán sus publicaciones, un determinado tono de comunicación y, de ser posible, un registro lingüístico propio, al menos a grandes rasgos. Estos tres elementos estarán presentes en cada uno de sus tuits, y buscarán simular un sentido de personalidad para estas entidades digitales.

Reflexión final

El proyecto Contenido Manipulado busca emular el extenso y heterogéneo ecosistema de la desinformación en el entorno digital, que incluye, además de los creadores de noticias falsas, a usuarios consumidores de fake news, los cuales, a su vez, pueden ser distribuidores de las mismas. Para ello se han desarrollado distintos componentes que operen tanto en el plano de la producción como en el de la distribución. Y estos componentes son construidos sobre la base de unidades textuales que se permutan a partir de pequeños programas que permiten generar múltiples enunciados; es decir, la escritura tradicional se ve amplificada por los programas que permiten intercambiar frases como si fueran variables en una operación matemática. De este modo, la producción textual tiene una preponderante naturaleza algorítmica. Dicho esto, se busca, con la suma de las piezas que conforman Contenido Manipulado, desarrollar una literatura algorítmica que imite las dinámicas de una desinformación algorítmica, lo cual habría sido imposible con una composición literaria no mediada por lo digital.

Del mismo modo, de forma más específica, con el accionar de este grupo de replier bots, la obra busca explorar la conversación digital entre dos entidades algorítmicas como una manifestación literaria. No solo se trata de dos dimensiones narrativas, como se ha planteado líneas arriba, sino también de que el producto literario específico de estas piezas es una conversación presideñada entre dos entidades digitales. De tal forma, por un lado, se ha buscado utilizar de manera creativa la tecnología que permite que un bot le responda a otro. Se han creado diálogos en géneros de tan larga trayectoria como el drama desde civilizaciones antiguas. La diferencia aquí reside en que se desarrolla entre dos bots de Twitter. Por otro lado, se ha buscado utilizar esta tecnología para criticar el accionar mismo de los bots que han esparcido desinformación a lo largo de la pandemia. Es decir, esta tecnología ha sido instrumentalizada con fines maliciosos, y los bots de esta obra buscan impulsar una conciencia crítica sobre este hecho. Y la manera en que se busca dejar evidenciado este funcionamiento perverso de las tecnologías propias de la web social es a partir de la imitación. En tal sentido, estas piezas buscan llamar la atención sobre las deformaciones y usos perniciosos de las posibilidades tecnológicas del entorno propio de las redes sociales. Ello es posible a partir de considerar, como en otras piezas del proyecto, que la ficción -porque los bots son identidades digitales ficcionales- puede tener un papel evaluativo de la realidad.